Si te ha tocado repetir la experiencia de la infidelidad en la relación e intentas una y otra vez porque la pareja ruega arrepentido otra oportunidad y promete que no volverá a pasar, para que después de un tiempo se repita esta misma escena, entonces este artículo es para ti.
Días pasados recibí un mensaje de una seguidora y preguntaba lo siguiente:
¿Cómo hacer para soportar tantas veces la infidelidad?
Para dar respuesta a esta pregunta empecemos a ver que hacen la mayoría de las personas que viven esta experiencia.
Cuando sale a la luz la infidelidad, la persona que fue la que cometió el acto se siente sumamente culpable por el sufrimiento que esto causa en su pareja, mientras que la persona que se siente traicionada busca la respuesta a “¿Por qué me hizo esto?”.
Uno se considera la víctima y el otro el victimario.
El victimario arrepentido busca el perdón y la siguiente oportunidad, promete no volver a lo mismo, bajo su sentimiento de culpa busca complacer a su pareja en todo lo que puede para demostrar su cambio y buenas intenciones.
La víctima, aunque con mucha desconfianza, percibe la sinceridad y por eso accede a dar una siguiente oportunidad de continuar con la relación.
En este estado siente que le hicieron algo muy cruel e injusto. Siente que la pareja tiene una deuda a pagar por el dolor que está pasando y dice “si me prometes cambiar te daré una oportunidad, pero te tienes que ganar mi confianza”.
Con esto se podrán imaginar cómo la relación está siendo disfuncional.
Esto sucede casi en la mayoría de las parejas que viven la experiencia de la infidelidad, pero esto no soluciona la situación y hay una alta probabilidad de que volverán a incurrir en la experiencia, tanto de la misma persona como de que se da la vuelta a la situación y ahora es la “víctima” quien comete el acto.
Una oportunidad para crecer
Entender qué hay realmente detrás de la experiencia de la infidelidad que estás viviendo te dará la oportunidad de crecer, pero para ello quiero escribir y poner más claridad sobre cómo las relaciones “son el medio para evolucionar“.
Crecemos a través de los demás y la pareja es el maestro de vida por excelencia y esto incluye también esta experiencia de la infidelidad. Y con esto no estoy justificando la infidelidad, ni emitiendo juicio alguno al respecto.
La infidelidad es como esa cachetada desesperada que le damos a alguien para que reaccione para salvarle de una tragedia.
Supongamos que vieras a tu hijo pequeño con un objeto intentando introducirlo en la toma corriente, es posible que le grites con tanta intensidad que se asuste para que tire lo que tiene en la mano y no lo haga, pero el susto que le diste aunque le traume de por vida cada vez que vea un toma corriente también le ha salvado de morir electrocutado en ese instante.
Aunque no lo creas, esta métafora te habla del objetivo que hay detrás de la infidelidad en tu vida y te lo explico a continuación.
¿Te has sido fiel a ti mismo/a?
En la vida vamos tomando decisiones basadas en creencias e ideales que deseamos alcanzar, en ocasiones son realistas y en la mayoría de los caso no lo son. Es muy común que acumulemos en nuestra vida incontables decisiones que hayan supuesto la renuncia y el sacrificio de nuestra individualidad, que es el valor único en nosotros para alcanzar nuestros objetivos.
Cuando esto sucede y no somos conscientes de que estamos haciendo estas “renuncias” o, si somos conscientes de que la hacemos, no le damos la importancia que tiene, nos va alejando cada vez más de nuestro sentido de vida y propósito, y nos vamos apagando más y más.
Cada vez que tomaste esa decisión en contra de ti, es como haber hecho una pequeña autotraición.
Es por esto que resulta muy frecuente que las personas que acuden a buscar ayuda por traición descubren en el proceso de liberación de su dolor la forma en la que se han traicionado a sí mismas.
Descubren cuán infiel se han estado siendo a ellas mismas en su vida, en diferentes áreas, porque se limitaban vivir lo que querían por sus propios miedos. Y no se estaban dando cuenta que cada decisión tomada como describimos arriba había supuesto un abandono a sus sueños, metas y a su propia responsabilidad de sentirse bien con ellos mismos, usando excusa a limitaciones externas.
Desde esta perspectiva, la infidelidad es la oportunidad de despertar a vivir sin miedo.
En una relación no hay víctima y victimario, ambos co-crean las experiencias. Y por eso te invitamos a que tengas una nueva mirada a la infidelidad, una mirada que os dé la oportunidad de cambio a los dos desde el interior de cada uno.
Es conveniente que tú hagas tu proceso interior para sanar la experiencia porque las percepciones de carencia nunca serán satisfechas desde afuera. Esta forma de hacerlo te llevará a un vacío cada vez mayor y hasta que no aprendas a llenarlo desde tu interior, la experiencia de dolor permanecerá en tu vida, y cada vez con mayor intensidad.
¿Otra oportunidad?
“Si mi pareja cambia le doy otra oportunidad”. Esta frase esconde un mito que no funciona y el que nos hemos contado hasta el día de hoy. Al decirte esto estás negando y rechazando la oportunidad real de cambiar tu vida y de crecer a partir de las experiencias que, aunque son un desafío, también traen grandes regalos de amor.
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Óscar Durán Yates y Gladys Hamann
PD: Lo peor que podría pasarte es quedarte como estás. Pero ¿y si empezaras a mejorar?